viernes, 26 de octubre de 2012

180 segundos

Acomodándole la almohada le pregunté: asi esta bien? Si! asi está bien! me respondió  regalándome esa dulce sonrisa de la que me enamoré. Esa sonrisa que paraliza el tiempo como atrapándolo en una fotografía  haciéndolo todo eterno.
Rezaste? pregunté. No, aun no. Te estaba esperando para hacerlo contigo.
Bueno pues, vamos! "Padre nuestro...santificado sea Tu Nombre... hágase tu voluntad... amen."
Me cogió de la mano mientras acariciaba mi cabeza con la otra. Añadió: Vas a estar bien, no? Claro que si! es solo un hasta pronto. Importa ahora que tu estés bien, le contesté. Proseguí  Claudita va a estar muy bien. Que rápido ha crecido no?
Si, es cierto. Ya dejo de ser una bebé y es ahora una niña muy linda y traviesa, me contestó ya con dificultad.
Entonces me miró. Con esa mirada de siempre, esa mirada como de quien mira el estrellado azul iluminado por la Luna. Tomó aire y me dijo: Gracias por todo! he sido muy feliz a tu lado! Gracias, gracias y gracias mi amor!
Dios sabe que me dolía el alma y que en cada latido de este corazón se me iba la vida un millón de veces. Dios sabe como me mordí los labios para no llorar. Entonces le sonreí y le dije: Gracias a mi? Ay Amor! ni se te ocurra si es por ti por quien viví. Sino fuera por ti estaría perdido como el grano de arena tirado al viento.
Mira Amor, le dije. No te distraigas por nada! no atiendas al dolor. Sólo mira la meta y ve tras ella. El Buen Dios ya te espera. Escucha! está tocando la puerta. Ábrele cuando quieras. No te preocupes por mi, ni por Claudita. Te juro que estaremos bien y antes de que te des cuenta, estaremos nuevamente juntos, pero esta vez para siempre.
Me pidió que le contase nuevamente de cuando nos conocimos. Y comencé  Fue un lunes por la mañana. Cuando te vi, todo el universo se detuvo. Le conté también como me temblaron las piernas y mi existencia toda cuando por fin la pude besar. De aquella primera vez que conocí que se tomaba (y lo hacía en serio) todo el tiempo de mundo para arreglarse. Siempre le dije que no necesitaba hacerlo pues era muy hermosa, realmente hermosa. Yo era un chimpancé a su lado.
Entonces, comencé a reír por la alegría que esos recuerdos me causaban.
Añadí: Y te acuerdas de aquella otra vez que me contagiaste tu gripe? te acuerdas? ... te acuerdas? solo hubo silencio. Ese silencio del que rogaba jamás llegase, pero llegó y no se iría mas.
Me levanté, le di un beso en la frente y cubrí sus pies con el edredón azul que tanto le gustaba. Comencé a llorar, de alegría porque ya estaba con Dios y de tristeza pues no la vería durante un tiempo y pese a mi esfuerzo sería desgarrador vivir sin su aire, como tratar de respirar arena. Fue en ese instante que vi a la soledad tratando de meterse por la ventana. La cerré.
Entonces, Claudita entró al cuarto. Me miró sorprendida y extendiendo los brazos pidió que la levantase.
Claudita! mama ya se durmió  ya descansa.  Me pidió que te dijera que te portases bien. Así sera no? Si papa, así sera! respondió con su naciente habilidad para hablar.
Bueno, vamos! Dale un beso! que a ti y a mi nos toca la aventura de seguir viviendo. Nos toca hacernos dignos de su sacrificio para que ella sepa que su vida valió la pena por la nuestra.
Me pidió que la pusiera al suelo, me dio un beso en la mejilla, me sonrió y comenzamos a caminar...

jueves, 25 de octubre de 2012

Goyito...y las estrellas?


Discúlpame, pero no te entiendo! cómo es eso de que quieres a las dos? Nada dijo. Miró el lustre de sus zapatos -estimo que muy costosos- cogió su sandwich, mordiéndolo, quizá con la torpe ilusión que me olvidaría la pregunta. Yo seguí rabiosamente mirándolo. Luego levantó la mirada y respondió: pero es que simplemente pasó! y tu sabes que las dos son mujeres extraordinarias! Añadió: no quise que sucediera así, ya te dije, simplemente paso!

En ese instante viajé en el tiempo. Recordé cuando de niños a orilla del mar armábamos cohetes de arena. Me decía: "Allí pondremos nuestro sueños para que vayan hasta las estrellas pues allí queremos llegar, no?" Queríamos cambiar el mundo. Recordé también que Goyito siempre hacía las ordenes de los demás. "Goyito termina tu sopa y deja el pan", "Goyito, ponte zapatillas pues queda mejor que con zapatos", "Goyito, tu camisa amarilla queda mejor con esta corbata rosada de puntos negros", "Goyito, acompáñame a comprar", "Goyito, deberías ser abogado y no ingeniero", "Goyito, cuando te cases tendrás dos hijos", " Goyito, sueño con que seas importante." Esos sueños eran buenos pero el no decía nada sobre sus propios sueños. Siempre hacía lo dicho por los demás. En mi opinión, se estaba construyendo el hombre "agua tibia", ni caliente, ni frío. Creo que por eso las cosas que le han pasado en realidad conscientemente nunca las quiso y es que jamás decidió virilmente por alguna u otra cosa.

Él se casó con una buena mujer, guapa y de muy buenos sentimientos (que mas quiere un hombre?). Tuvieron un hijo que tiene unos ojos que miran el centro de la galaxia y mas allá. Apenas nacido, su esposa entró en una depresión muy fuerte y esa situación lo hacía sufrir muchísimo, pero fiel a su estilo, nada dijo, nada replicó. Hizo del alcohol su mejor amigo. Entonces la olla siguió llenándose de frustración hasta que reventó. En medio de esa crisis apareció otra mujer. Ella lo comprendió, lo llenó de atenciones y muy generosamente le regalo su hombro para que llorase. Le decía además que la depresión de su esposa pasaría, que no se preocupe, “ahora me tienes a mí para cuidarte”. Él se encontraba a tiro de penal y pasó lo que obviamente pasaría....la besó, la hizo suya encargando un presente de París. Se lo traería una cigüeña, esa ave que siempre revolotea alrededor de personas sumergidas en estas situaciones...y entonces, se escapa Maradona, se lleva a uno, a dos, a tres, pellízquenme para saber que no estoy soñando, se lleva a cuatro y …. goooool!!!

Cómo que simplemente pasó? No seas fresco! sucedió porque como siempre "te dejaste llevar". No tuviste las agallas para tratar de solucionar tu vida, te dejaste llevar por las circunstancias! y ahora, estás en medio de dos situaciones muy complicadas! Si pues! añadió. Pasó! Mierda!  mirando nuevamente el lustre de sus zapatos (que mirándolos bien no son costosos). Y entonces, qué vas a hacer? Respondió: No se! que crees que debo hacer? No se trata de lo que yo crea sino de lo que tu quieres hacer y debes querer hacer lo que dicta tu corazón, y en tu corazón tienes criterios para tomar la mejor decisión. Recuerda todo lo aprendido sobre el Matrimonio. Recuerda el juramento hecho ante Dios. No dejes que el miedo te amordace. Tu vida está en tus manos, no en las mías!  Ya! deja de llorar! ...entonces sentí lástima por él, es mi amigo y me destruía verlo así. Acaricié su cabeza y con la intención de que enfrente la verdad (porque a su esposa no la dejo de amar y fue por soledad que se entregó a los brazos de otra mujer) quise provocar una reacción y le dije: A quien amas? a cual de las dos amas?

Hubo un silencio que nos abrazó a los dos, un silencio huido por un gemido avergonzado: Ya es tarde y debo irme!... Las quiero a las dos! ...las quiero a las dos! ... no me entiendes? las quiero a las dos!

Mientras él se iba, terminé mi café y pagué la cuenta, pero antes de subir a mi auto le envié un mensaje de texto preguntándole: "Goyito... y las estrellas?"

domingo, 7 de octubre de 2012

Y asi me iré...

La muerte tarde o temprano vendrá por mí y aunque alguno no quiera, también vendrá por cada uno de ustedes. Es una realidad innegable e irresistible. No hay, ni habrá dinero, ni poder o encantamiento que evite tal viaje. Llamará a la puerta de mi vida, tocará, sintiéndose invencible, me guiñará un ojo y luego de me dirá  "Esperaré unos meses a que prepares maletas y luego entraré por ti." O quizá simplemente se meta por la ventana y me lleve a medianoche, mientras duerma. No tengo la puta idea de como sucederá...
Cuando aquello pase habrán algunos pocos o quizá muchos que lloren. Llorarán los que solo descubran el vacío que procura la muerte, así como también aquellos que piensen y confíen en que hay un mas allá lleno de Amor esperando por mi (y también por ti).
Llorarán los míos y quizá también alguno que en algún momento escuche alguna historia sobre mi, pues siempre habrán historias que contar de cualquiera y siempre habrá alguien que hubiera querido conocerme y preguntarme cualquier cosa. Desde como se siente morir? o como hiciste tal o aquella otra cosa? o por que lo hiciste? ... me imagino a alguno preguntándome  es feo morir? y esa sera la única pregunta que no responderé  No vale la pena pues quien la haga no vivió. Aunque sea paradójico, aquí ya se la respondí.
No diré que no me importa morir pues seria una gran mentira! Claro que me importa morir.
Me asomaré por la ventana del cajón a verme y daré gracias a ese montón de huesos y carne que me ayudo a caminar. Luego mirare primero a los míos  luego a los amigos y finalmente a los que saborean el café y las galletas que con o sin mantequilla nunca faltan en estas despedidas. Aseguro desde ya un buen pedazo de pastel al mejor chiste!
Me sentaré al lado de mis hijos y mi esposa, y tratarée de ver sus miradas pues ellas nunca engañan! Buscaré ver en ellas aquel aliento de vida que con mi vida mientras estuve con ellos trate de darles. Sabre entonces que mi vida valió la pena pues los ayude a vivir. Los ayude a plantearse metas, a enfrentar los problemas, a vencerlos y seguir viviendo mirando siempre la meta. En resumen: los ayude a AMAR!!!
Confío en que mas allá de las lagrimas podre ver ese aliento de vida heredado.
Entonces, saldré al patio, encenderé, como todas las noches, un cigarrillo, lo degustaré, sonreiré agradecido con Dios y recién me podre ir. Tranquilo. Con mi típico andar  pausado y las manos en los bolsillos. Con la conciencia de que mi vida valió la pena pues les ayude a vivir...y así sera, lentamente me seguiré yendo hasta verlos nuevamente pero esta vez...esta vez para siempre!!!