No fue por falta de huevos!!! sino porque me sobraban!!!

Era una Diosa! Diva total! Cuando la vi me quedé más estúpido de lo que ya reconocidamente soy. No se imaginan las piernas que tenía! y ese escote! válgame Dios!  Esos dos secretos que atrevidamente asomaban más que por cierto tenían responsabilidad  penal por la extinción sangrienta de trillones de salvajes búfalos! Fue entonces que por la razón que fuera me quedo mirando... Si! a mi! que desde luego en nada soy feo, sino que únicamente deben mirarme con harta paciencia! me miró con esos ojos que certifican la existencia de Dios, me quedó mirando y fue entonces que me descubrí transportado al centro de la galaxia, rodeado de cientos de trillones y trillones de estrellas! Mi cuerpo temblaba!  Sepan que toda mi cancha y concha para este tipo de situaciones se hicieron mierda y fue entonces que noté mi incapacidad para continuar sosteniendo mi copa de vino. Carajo! reaccioné,  Macho que se respeta no arruga así que gentil y todo  lo que varonilmente pude ser, si acaso alguna vez lo fui,  levanté  mi copa y le sonríe diciéndole: "Gracias por existir! Porque hoy amanecí sin fe pero al verla a Usted la recupere toditita!" Ella se dejó escapar una carcajada, frente a lo cual y absolutamente indefenso no sabía si pensar que se estaba riendo porque yo era un completo imbécil o porque quizá ya había entrado, ósea, ya podía seguir hablándole. Como se que quien no arriesga no gana y yo si soy súper arriesgado le dije: " Usted está sola, y yo también - pues para variar nuevamente me habían plantado, lo que obviamente no le dije -  porque no conversamos un rato?  créame Divina que bien va a valer la pena" Respondió intrigada: " En verdad piensa Usted eso?"  Retruqué: "Es de lo único que estoy seguro en mi vida!" Añadí: " Vamos, sólo un instante...quizá cambie nuestras historias!" Me miro con muchísima suspicacia y gusto, porque idiota no soy (aunque se que lo parezco) y lo note! y es que pienso que cuando una mujer te mira con admiración es porque en algo le gustaste. Añadió: "Solamente unos minutos pues estoy esperando a alguien" No se imaginan el esfuerzo sobrehumano que hice para no cagarme  de risa pues tenia muy en claro que  a nadie esperaba. Añadí: " Desde luego, se que soy inoportuno, pero no es mi culpa y tampoco suya el ser tan inigualablemente hermosa, ni la mía el saber admirar su belleza!" Para entonces ya estaba sentado en su mesa, disfrutando del centro de la galaxia! Se sonrió y con ese gesto me regaló vida, esa vida que tanto y tanto anhelo, esa vida que tanto y tanto busco. "Me llamo "Inquisidorinquisitorial" y Usted? No, no me lo diga, déjeme adivinar, Usted se llama Diosa!"  Ella volvió a sonreír y me dijo:" Si, ese es mi nombre! aunque registrada estoy como Clotilde pero he notado atrevido inquisidor  que eso a Usted no le afecta". Obvio -pensé-  pues bien se podía llamar "Eutilia" si quisiera y nada me importaría pues yo siempre la llamaría "Diosa" (como hasta el día de hoy la llamo).  Entonces me dije y ahora que hago? Pues nunca había llegado tan lejos, pero como uno debe actuar rápido, fue que añadí  " Diosa, y que hizo que se abajara a este mundo? acaso el Cielo no le fue suficiente?" Cruzo las piernas, lo que obviamente noté y respondió: " No, no me fue suficiente! pues el amor que tuve se me fue". Sentí vergüenza masculina ajena y le dije: "Naaaaaaa.... Diosa! a los mortales puede faltarnos el amor, pero a una Diosa, no! De ninguna manera! Jamás!" Retrucó: "Si! aunque no lo creas, el amor se me fue!"  (noten que ya me tuteaba) entonces la tristeza tomo posesión de mi existencia toda, mientras eso pensaba, ella dejo escapar dos lágrimas, saqué mi pañuelo "Givenchy" y rocé tiernamente sus ojos: "Vamos! Si Usted llora, llora todo el cielo!, Usted no debe llorar jamás! Usted debe mostrarnos a nosotros seres miserables como los hombres lo que es ser plenamente feliz!"  Me dijo: "Gracias! pero lloro por ese amor que se fue de un momento a otro, se me fue de la mano como el agua, inesperadamente, sorpresivamente! Y no encuentro respuesta consoladora a mis hijos, pues sí yo nada entiendo, ellos menos!" Entonces me imaginé a ese hombre que la dejo ir, debe ser un completo imbécil! me dije, pues un verdadero hombre no deja ir a una Diosa. Recordé entonces que el verdadero Amor solo busca el bien del otro y en ese contexto le respiré: "Debe usted estar tranquila pues el debe estar vislumbrado por alguna baratija y eso al final siempre un hombre  medianamente inteligente se da cuenta. Usted es extraordinaria! Y NO por su extraordinaria belleza sino más bien por su hermosa mirada! Y en ella, todo la valía que deja transparentar!" Fue en ese instante que volvió a regalarme aquella sonrisa por la que un hombre daría su vida terrenal y además la eterna. "Diosa, tenga fuerzas y confíe! El, si de verdad la ama, volverá y sino es así  pues entonces mejor que se haya ido, pues Usted solo merece ser irrepetiblemente feliz!" . Me dio las gracias y volvió a sonreír.  Añadí: "Un café?" " Si" respondió. Entonces sin poder amarrar esta lengua viperina y de mi mal habito burlesco, de los que soy esclavo le susurré: " Dígame la verdad! Usted no espera a nadie. Sólo quiso respirar aire puro al igual que yo". Abrió esos ojazos pardos realmente hermosos, se puso roja como un tomate fresco, comenzó a morderse los labios, totalmente sorprendida y ciertamente ya rendida,  y me dijo: " Y Tu de donde te escapaste?" Le respondí: "De ninguna cárcel pues ninguna mujer me quiere en su cárcel de amor". Nuevamente abrió los ojos y dijo: "No te creo, pues sí fuera yo no te dejo ir de ninguna manera, yo te encarcelo en mi vida para siempre!" Me reí demasiado al extremo que al cabo de unos segundos los dos nos estábamos riendo a mandíbula desatada!   Entonces le besé un largo instante sus dos manos respirando toda su grandeza de mujer digna, luego besé su frente dos veces, rasqué su perfecta cabecita y le dije: "Ya es tarde y tus hijos te esperan en casa, permíteme pagar la cuenta y pedir un taxi que te retorne al cielo con tus hijos, ellos te necesitan y ambos ya hemos respirado el aire que salimos a buscar para hacer correr a la soledad! Vete a tu casa!" Ella me volvió a mirar pero esta vez con absoluta ternura y me dijo: "Gracias Inquisidor! Yo seré feliz con el o sin el, lo seré con mis hijos y por mis hijos! deseo con el corazón en la manos que Tu también lo seas!"  Semejante muestra de su mundo interior me arrebataron un " Te juro que así será!" Pagué la cuenta,  puse mi saco sobre ella y la ayude a subirse al taxi. Mientras se alejaba rumbo al cielo prendí un pucho y respire muy profundamente. Alcé la mirada al Cielo, lo miré lleno de estrellas y enrumbé hacia mi viejo auto. Prendí la radio para escuchar música y me fui rumbo a mi casa. No saben, después de mucho tiempo pude escuchar a mi corazón latir nuevamente acompasado!
En el camino me puse a pensar que hay hombres imbéciles como aquel esposo que por una baratija dejo a una Diosa! una Diosa por la que cualquier hombre, hasta yo (enano mental o hijo de puta, llámenme como quieran),  se convertiría en  un SUPER HEROE! y por que no? si acaso fuera posible, hasta en un Dios!  y es que a una mujer solo se le ama con la vida toda! y mas allá!  Ustedes se preguntarán por qué no la besé en los labios? y por qué no la hice mía?  Sepan que no fue por maricón! pues tengo los huevos bien puestos!  No lo hice porque Ella era una mujer de VERDAD! no fue por falta de deseo! lo que pasa es que el deseo se rinde y huye  desesperado ante tanta DIGNIDAD FEMENINA! ... no lo hice porque al final de cuentas SOY HOMBRE!